Blog

  • ¿Por qué el cerebro prefiere el papel?

    26 May 2017
    Editor Colorjet
    2019
    0

    El cerebro humano puede percibir un texto en su totalidad como una especie de paisaje físico. Cuando leemos, construimos una representación mental del texto. Al pasar las páginas de un libro de papel, se realiza una actividad similar a dejar una huella tras otra por un sendero, hay un ritmo y un registro visible del transcurrir de las hojas impresas

    La reconocida revista Scientifican American publicó un artículo que pretende explicar esta paradoja: en la época de la hiperconectividad, cuando cada vez tenemos más equipos que nos permiten leer y contamos con acceso a bibliotecas enteras en formato electrónico, muchos siguen prefiriendo el papel. 
El libro tradicional, la revista, el diario, siguen siendo favoritos. Y aunque resulte difícil de creer, como docente universitario escucho frecuentemente la pregunta de muchos alumnos jóvenes: “¿En qué libro lo puedo leer, profe?”.

    Sin-titulo-1

    Muchos trabajos hablan de que en pantalla se lee más lentamente y, además, se recuerda menos. Hay “fisicabilidad” en la lectura, dice Maryanne Wolf de la Universidad de Tufts. 
Las personas necesitan sentir el papel al leer, el cerebro lo pide inconscientemente.

    Nosotros no hemos nacido con circuitos cerebrales dedicados a la lectura, porque la escritura se inventó hace relativamente poco tiempo en nuestra evolución: alrededor de cuatro milenios antes de Cristo. En la niñez, el cerebro improvisa nuevos circuitos para leer y para ello usa parte de otros dedicados al habla, a cuya habilidad se suma la coordinación motora y la visión.

    El cerebro comienza a reconocer las letras en base a líneas curvas y espacios y utiliza procesos táctiles que requieren los ojos y las manos. Los circuitos de lectura de los niños de 5 años muestran actividad cuando practican la escritura a mano, pero no cuando se escriben las letras en un teclado.

    Más allá de tratar a las letras individuales como objetos físicos, el cerebro humano puede percibir un texto en su totalidad como una especie de paisaje físico. Cuando leemos, construimos una representación mental del texto. La naturaleza exacta de tales representaciones permanece clara, pero algunos investigadores creen que son similares a un mapa mental que creamos de un terreno, como montañas y ciudades, y de espacios físicos de interior, tales como departamentos 
y oficinas.

    En paralelo, en la mayoría de los casos, los libros de papel tienen una topografía más evidente que el texto en pantalla. Un libro de papel abierto presenta dos dominios claramente definidos: páginas de izquierda y derecha y un total de ocho esquinas en las que uno se orienta. Al pasar las páginas de un libro de papel se realiza una actividad similar a dejar una huella tras otra por un sendero, hay un ritmo y un registro visible del transcurrir de las hojas. Todas estas características permiten formar un mapa mental, coherente, del texto.

    En contraste, la mayoría de los dispositivos digitales interfieren con la navegación intuitiva de un texto y a pesar de que los e-readers (libros electrónicos) y tabletas replican el modelo de páginas, estas son efímeras. Una vez leídas, esas páginas se desvanecen.

    “La sensación implícita de dónde usted está en un libro físico se vuelve más importante de lo que creíamos”, dice el artículo de la Scientifican American . También pone en cuestión que los fabricantes de libros electrónicos hayan pensado lo suficiente sobre cómo es posible visualizar dónde está el lector en un libro.

    En un trabajo sobre comprensión de texto, al comparar alumnos que leyeron en papel con otros que leyeron un texto en versión PDF en la pantalla, se concluyó que los primeros tuvieron mejor rendimiento.

    Otros investigadores están de acuerdo con que la lectura basada en pantallas puede empeorar la comprensión, ya que es mentalmente más exigente e incluso físicamente más cansadora que la lectura en papel. La tinta electrónica refleja la luz ambiental al igual que la tinta de un libro de papel, pero las pantallas de ordenadores, teléfonos inteligentes y tabletas hacen brillar la luz directamente en los rostros de las personas y la lectura puede causar fatiga visual, dolores de cabeza y visión borrosa. En un experimento realizado por Erik Wästlund, de la Universidad de Karlstad en Suecia, las personas que tomaron una prueba de lectura comprensiva en un equipo electrónico obtuvieron calificaciones más bajas e informaron mayores niveles de estrés y cansancio que las personas que completaron en papel.

    Las investigaciones más recientes sugieren que la sustitución del papel por pantallas a una edad temprana tiene desventajas. En 2012, un estudio en el Joan Ganz Cooney Center en la ciudad de Nueva York reclutó 32 parejas de padres e hijos de 3 a 6 años de edad. Los niños recordaron más detalles de las historias que leyeron en el papel pese a que las digitales estaban complementadas con animaciones interactivas, videos y juegos, que en realidad desviaban la atención lejos de la narrativa.

    Como resultado de un trabajo que involucró el seguimiento de una encuesta de 1.226 padres se informó que, al leer juntos, la mayoría de ellos y sus niños prefirieron libros impresos sobre los libros electrónicos. Al leer los libros de papel a sus niños de 3 a 5 años de edad, los niños podían relatar la historia de nuevo a sus padres, pero al leer un libro electrónico con efectos de sonido, los padres con frecuencia tuvieron que interrumpir su lectura para pedir al niño que dejara de jugar con los botones y recuperara la concentración en la narración. Tales distracciones finalmente impidieron comprender incluso la esencia de las historias.

    Muchas personas aseguran que cuando realmente quieren centrarse en un texto, lo leen en papel. Por ejemplo, en una encuesta realizada en 2011 entre estudiantes de posgrado en la Universidad Nacional de Taiwan, la mayoría aseguró que navegaba algunos párrafos de un artículo en línea antes de imprimir todo el texto para una lectura más a fondo. Y en una encuesta realizada en 2003 en la Universidad Nacional Autónoma de México, cerca del 80 por ciento de los 687 estudiantes dijo preferir leer el texto impreso.

    Encuestas e informes sobre los consumidores sugieren que los aspectos sensoriales de la lectura en papel importan a la gente más de lo que cabría suponer: la sensación de papel y tinta; la opción de suavizar o doblar una página con los dedos, el sonido distintivo de pasar una página, la posibilidad de subrayar, de detenerse y tomar nota, hacen que se elija más el papel. Para compensar este déficit sensorial, muchos diseñadores digitales tratan de hacer que la experiencia de los lectores electrónicos –en inglés, e-reader– esté tan cerca de la lectura en formato de papel como sea posible.

    La composición de la tinta electrónica se asemeja a la química típica de la tinta, y el diseño sencillo de la pantalla del Kindle (una marca de libro electrónico) se parece mucho a una página en un libro de papel. Sin embargo, estos esfuerzos –que fueron replicados por su competidora Apple iBooks– hasta ahora tienen más efectos estéticos que prácticos.

    El desplazamiento vertical puede no ser la forma ideal de navegar un texto tan largo y denso como en los libros de muchas páginas, pero medios como el New York Times , el Washington Post y ESPN crearon atractivos artículos, altamente visuales, que no pueden aparecer en la impresión, ya que combinan texto con películas y archivos de sonido.

    Es probable que el organismo de los nuevos nativos digitales cree otras redes neuronales que les permitan preferir lo electrónico al papel, pero mientras tanto, hoy el resto de la población sigue prefiriendo el contacto con las históricas hojas.

    FUENTE: http://www.lavoz.com.ar/temas/por-que-el-cerebro-prefiere-el-papel

    Continue Reading
  • Sacco, de la UIA: “La industria gráfica no está en crisis, Donnelley es un caso particular”

    20 May 2017
    Editor Colorjet
    1202
    0

    El presidente de la Federación de la Industria Gráfica y Afines (FAIGA), y segundo de la entidad fabril dijo que el cierre de la imprenta “no refleja la realidad del sector”.

    Continue Reading
  • Inventan un papel ‘ecológico’ fabricado con piedra

    19 May 2017
    Editor Colorjet
    1037
    0

    Un poco de yeso, caliza y mármol, mezclado con resina y ya tenemos un papel de piedra. ‘TerraSkin’ es un nuevo material sustitutivo del papel, el cartón y el plástico respetuoso con el medio ambiente.

     

    Este papel innovador no necesita madera ni agua para su producción. Además, su color blanco se consigue sin utilizar cloro ni ácidos de ningún tipo. Un material resistente conseguido gracias a una combinación de polvo mineral (80% Carbonato Cálcico) y un 20% de resina no tóxica que actúa como coligante.

    Comercializado en EEUU desde 2004, ha sido presentado este jueves en Madrid como una alternativa medioambiental al elaborado con fibra de celulosa tradicional. Llegará a Europa de la mano de Emana Green, empresa distribuidora con sede en España.

    Sin arboles, sin agua y sin cloro. Este es el eslogan de la empresa estadounidense que hace hincapié en las ventajas de su producto. No requiere cortar ningún árbol, no gasta agua, ni la poluciona, no necesita ser blanqueado con cloro, utiliza un 50% menos de energía para su producción que el convencional y es 100% reciclable (se degrada con una exposición al sol de entre 3 a 9 meses). Por este motivo ha conseguido el certificado plata ‘Cradle to Cradle’. Además, en su producción no se emiten gases y cuando se incinera emite un 50% menos de CO2 que el papel convencional.

    Un material muy resistente al agua, a la grasa y al aceite, por lo que resulta especialmente indicado para la fabricación de bolsas, etiquetas auto-adhesivas o cuadernos.

    Fase inicial

    EEUU, Canadá, China y Dubai ya cuentan con este material en empresas e instituciones como el MoMA de Nueva York. Ahora la empresaMiquelrius de Barcelona es la primera en Europa que lanzará una línea de productos hechos con ‘TerraSkin’.

    Sin embargo, su elevado precio (es un papel 4 veces más caro que el habitual) lo convierte en poco competitivo para la venta directa a los ciudadanos. «Como no es papel, las colas especiales para encuadernar son más caras. Por el momento vamos a sacar una colección pequeña a nivel industrial», afirma Sara Sabi de la empresa catalana. En este sentido, Ignacio Schmidt, director de EmanaGreen, ha asegurado que el objetivo de su empresa es llevar ‘Terraskin’ a los hogares en un plazo de cinco años aproximadamente. «Si todo el papel del mundo fuera de este nuevo material se ahorraría la tala de más de 3.000 millones de árboles y el equivalente en CO2 a 55 millones de coches», afirma.

    A pesar de las aparentes ventajas de este material para el medioambiente, » un producto, un material o un modo de producción, por muy ecoeficiente que sea, no debe distraernos de nuestro verdadero objetivo: reducir, ahorrar y cambiar de forma radical nuestro modo de consumo. No podemos pensar que podemos consumir de manera finita en un planeta con recursos finitos. Por tanto, cuando se lanzan campañas de marketing y ecoeficiencia que fomentan el consumismo, es una contradicción con la conservación del planeta», matiza José Vicente Barcia, responsable de prensa y comunicación de la organización Ecologistas en Acción.

    Por su parte ‘Design and source’, creadora del producto, afirma que por cada tonelada de pulpa de papel utilizada para el papel convencional, con ‘TerraSkin’ se salvan hasta 20 árboles, se evita la emisión de 1.200kg de CO2 y se ahorran hasta 31 toneladas de agua.

    Fuente: http://www.elmundo.es/elmundo/2010/11/18/ciencia/1290103021.html

    Continue Reading